lunes, 21 de junio de 2010

NOSTALGIA...8º CAPITULO



La sorpresa se transformo en alegría. Nunca pensó sentirse así. El cambio no se notaba todavía, era el primer mes.
Sus dudas se transformaron en certezas. Su pensamiento voló hasta Moreno, su partida unos días atrás la dejó llena de dudas y mucha ansiedad. Se preguntaba que iba a hacer ahora, tenía un viaje para realizar, previsto para el Tibet, pero ya sería imposible realizarlo. Decidió llamar a la revista para comunicarles que no sería posible el viaje debido a su estado.
En la soledad del hotel, preparo su equipaje, su mochila maltrecha por los años de uso, le causó una sensación de tristeza. Por lo que ya no podría hacer. Finalizó su etapa de recorrer el mundo, mirando culturas y la naturaleza a través del objetivo de su cámara.
El cansancio y una mente llena de recuerdos de un faro, la llevaron a dormirse aún con la ropa puesta.
El amanecer llegó con una luz tenue, llenando la habitación de un halo rojizo. Al despertarse, una sola imagen tenía en su mente. Una cabaña, en realidad una choza en la playa, muy cerca del mar, varios mascarones de proa en al entrada. Y a él, Moreno, con esa mirada tranquila, observando el mar.
Los días se fueron sucediendo como un sueño, felicidad absoluta, el tiempo pasó, rápido, inevitable. Paseos por lugares antes nunca visitados. El amor había llegado por fin a su vida, con una fuerza arrolladora. Todo lo que había vivido antes, fue claramente superado por ese hombre.
Pero los dos tenían compromisos en sus vidas, la Legión Extranjera lo necesitaba del otro lado del mundo, era necesario que fuera servir a su país. Varios viajes más tendría que hacer ella para poder descansar en sus vacaciones. Pero la promesa del reencuentro, cuando se despedían, al subir Moreno al barco que lo llevaría a su destino, le dio una esperanza. Pero el destino sería otro.

0 comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.